La ciudad turística es el municipio con más cruces por kilómetro cuadrado de Canarias 

Este 3 de mayo pudo por fin la ciudad celebrar el merecido homenaje a su patrona, la Cruz, con un Puerto de la Cruz salpicado de este símbolo que guarda entre historias y leyendas la memoria del municipio. 

Desde el casco hasta todos y cada uno de los barrios, familias y colectivos se unen para compartir la celebración que, en tiempo de pandemia, se mantiene para animar y recordar que pronto se juntarán para festejar este 3 de mayo cuando se conmemoran las fiestas patronales de la ciudad. Este año, debido a las circunstancias extraordinarias, se han guardado todas las medidas de seguridad para impedir cualquier tipo de aglomeración en torno a capillas y cruces, lo cual no fue óbice para que las familias pudieran visitarlas durante todo el día.  

La solemne misa en honor a la Cruz de Plata del s.XVII, con una amplia representación de la corporación con su alcalde al frente, fue retransmitida por las redes sociales del Ayuntamiento, a la que siguió a mediodía la tradicional traca que se recupera para rememorar todas las historias y leyendas que surcan la memoria de todos los y las portuenses que, orgullosos, contemplan su historia ribeteada por esas cruces y capillas que iluminan las calles de la ciudad todos los 3 de mayo.  

Con anterioridad, a primera hora de la mañana, se produjo la ofrenda floral en el Templete del Peñón del Fraile que estuvo amenizada, siempre con todas las medidas de seguridad, por la Banda de música de Puerto de la Cruz. Previo a este acto, se produjo el homenaje a la Cruz de los trabajadores en las casas consistoriales con presencia de todos los grupos políticos y que ha realizado, con la tea procedente del desmantelamiento del Parque San Francisco, el personal de Obras y Servicios municipales, y que ya forma parte del patrimonio de la ciudad.  

Desde la Cruz de la Casa de Aduana, pasando por la Cruz de la Plaza del Charco, y las de la calle Mequinez hasta el Chorro Cuaco en la calle Valois, el casco urbano de Puerto de la Cruz cuenta con más de una treintena de cruces y media docena de capillas que se pusieron sus mejores galas ataviadas y engalanadas con flores, coloreadas por la mirada de los cientos de personas que contribuyen con su talento y trabajo para mantener esta tradición, que se expande por los barrios de la ciudad. Precisamente en calle Mequinez se expuso el trabajo de diferentes colectivos, así como de los centros escolares de la ciudad que también rindieron honores a la patrona de la ciudad. También cabe reseñar las diferentes cruces que de manera particular se engalanan por estas fechas en las casas de decenas de familias portuenses. 

Además, y como novedad este año, desde el área de Fiestas se han invitado a un colectivo de diseñadores de la ciudad para engalanar cruces de 3 metros con motivos florales en cada una de las entradas y salidas de la ciudad desde Punta Brava hasta Las Arenas pasando por El Botánico y San Antonio, y en el muelle como la entrada que es por mar al municipio. 

Desde Punta Brava hasta Las Dehesas, La Vera, Las Arenas, San Felipe- El Tejar, Calle Nueva, La Paz, El Botánico, Martiánez y El Durazno, todos tienen su rincón especial para seguir viviendo esta celebración allá por donde se vaya en el municipio con más cruces por kilómetro cuadrado de Canarias.