A partir de ahora este régimen posibilitará la utilización de los espacios pertenecientes al Ayuntamiento por particulares y asociaciones con seguridad jurídica y transparencia 

El Ayuntamiento de Puerto de la Cruz da un paso en la regularización de los distintos espacios municipales aprobando su primer reglamento de uso y cesión de locales públicos.  

Atendiendo a la gran demanda que existe en el municipio, y con una expansión creciente del movimiento asociativo, el gobierno ha trabajado para sacar adelante una regulación que garantice los derechos de todas las personas y colectivos para tener un lugar donde desarrollar una actividad de interés público o como sede social para el ejercicio de las funciones de cada asociación. 

“Teníamos el compromiso de establecer el orden debido y necesario a una actividad que consideramos importante para el desarrollo social y cultural del municipio”, explicó el alcalde Marco González. “Queremos acabar con la inseguridad con la que se regían estos espacios para además garantizar que los locales tengan un mantenimiento y un uso adecuado para el fin de su actividad”. 

Estos espacios municipales cumplen importantes funciones sociales y ciudadanas que ahora contarán con una normativa pública para el correcto desarrollo de sus funciones. “Era imprescindible dotar de seguridad jurídica y transparencia la cesión y uso de estos espacios que deben servir al bien común”, afirmó la concejala responsable de Patrimonio Julia Navas.  

Además, este nuevo régimen que estrena Puerto de la Cruz abre la puerta a que los diferentes colectivos puedan compartir espacio, impulsando de esta manera la participación y la creación de sinergias entre usuarios y los propios colectivos. “Esta posibilidad del coworking de ámbito social es una herramienta muy atractiva para propiciar redes de apoyo entre los colectivos y usuarios, así como la existencia de sinergias entre los distintos proyectos que alberguen estos espacios”.  

Entre los objetivos prioritarios que quedan plasmados en esta nueva regulación de estos locales municipales, es que sean lugares abiertos a la cultura, a la formación, progreso y dinamización de las personas participantes, del propio colectivo, impulsando la mejora de la calidad de vida y el bienestar social y personal de la ciudadanía de Puerto de la Cruz, donde queda absolutamente acotado el ejercicio de cualquier otra actividad que contraponga este objetivo.